Nosotros los humanos ignoramos su Naturaleza y queremos adaptarlos a la nuestra; situación que los rebeldiza, variando su temperamento,comportamiento y funcionabilidad, ellos requieren de liderazgo para afinar sus sentidos y tener un espacio dentro de la manada; para satisfacernos con obediencia y lealtad. Cuando ellos no obtienen un liderazgo, la rebeldía, timidez u agresividad afloran hasta convertirse en un «problema» en vez de una compañía satisfactoria.